Atlético y Godoy Cruz son dos equipos de la Liga Profesional con trayectorias y estilos distintos, pero ambos han logrado consolidarse en la máxima categoría en los últimos años, un logro poco común dada la competitividad del fútbol argentino.
El “Decano” fue fundado en 1902 y el “Tomba” en 1921. Con el tiempo, ambas instituciones se están volviendo referentes tradicionales en la elite del fútbol argentino, marcando el rumbo en sus respectivas regiones. Hasta hace dos décadas, tanto Atlético como Godoy Cruz alternaban entre distintas categorías del ascenso, pero comparten una característica en común: ambos han ascendido dos veces a Primera y su camino ha sido similar. Godoy Cruz logró el ascenso en 2006, pero no pudo sostenerse en la categoría y descendió tras una temporada. Volvió a Primera inmediatamente en 2007/08, y desde entonces ha mantenido su lugar en la máxima categoría. El “Decano”, por su parte, ascendió a Primera en 2008/09, aunque también descendió al poco tiempo. Su regreso definitivo se dio en 2015, y actualmente está completando su novena temporada en la Liga Profesional del fútbol argentino.
El “Decano” se caracteriza por aprovechar su condición de local, respaldado por una hinchada que crea un ambiente difícil para los rivales. Entre 2015 y 2016, mantuvo un invicto de 32 partidos en su estadio, estableciendo un récord. En 2018, alcanzo los cuartos de final de la Copa Libertadores, un hito para el club.
Godoy Cruz, por su parte, ha logrado buenos resultados en torneos nacionales, ocupando posiciones destacadas en varias temporadas. En 2018, estuvo cerca de ganar el campeonato de la Superliga, finalizando en segundo lugar detrás de Boca. Aunque en los últimos años ha enfrentado desafíos en cuanto a resultados, siempre se mantiene competitivo, especialmente cuando juega en su provincia, en el estadio Malvinas Argentinas.
Si bien ninguno de los dos equipos ha logrado coronar sus buenos momentos en el fútbol nacional con un título en Primera, ambos estuvieron cerca. Godoy Cruz estuvo a punto de coronarse en torneos de Liga, mientras que Atlético llegó a disputar una final de Copa nacional. Nada mal para dos equipos con economías muy diferentes a las de los clubes que suelen llevarse los títulos.
En cuanto a sus objetivos, ambos equipos buscan consolidarse en Primera y fortalecer su proyecto con la meta de competir en copas internacionales, para generar ingresos económicos y poder continuar desarrollando su infraestructura. El desafío más grande es construir un moderno centro deportivo de alto rendimiento en el predio que adquirió en San Andrés hace unos años.
Godoy Cruz, por su parte, está disfrutando de un 2024 favorable. Después de varias temporadas en las que navegó por la zona baja de los promedios, este año, junto a Vélez, ha sido uno de los equipos más regulares. De hecho, el “Tomba” marcha segundo en la tabla anual y, hasta el momento, está asegurando su clasificación a la Copa Libertadores; además, parece tener el boleto a la Sudamericana en el bolsillo.
Desde 2013, el club cuenta con el complejo polideportivo “Predio Coquimbito”, que incluye más de diez canchas alrededor de la infraestructura principal. En este edificio central se encuentran los vestuarios, el gimnasio, la sala de conferencias, los consultorios médicos y la lavandería con sus depósitos.
En este predio se entrenan todas las categorías del “Tomba”, desde el plantel principal hasta las divisiones infantiles. Aunque el complejo fue reinaugurado hace poco más de 10 años, en la última década ha continuado sumando comodidades. Por ejemplo, dispone de un gimnasio de más de 500 m², equipado con tecnología de punta.
En la historia reciente del “Tomba”, que mañana enfrentará al “Decano” en la fecha 20 de la Liga Profesional, encontramos varias similitudes con el club tucumano.
Godoy Cruz es uno de los ocho clubes más destacados del fútbol mendocino. A nivel nacional, es el equipo que más temporadas ha jugado en Primera División, con un total de quince participaciones (el “Decano” lleva diez). Además, al igual que Atlético, es el primer y único club de su región (Cuyo) que ha participado en torneos internacionales: Libertadores en 2011, 2012, 2017 y 2019; y Sudamericana en 2011 y 2014. Por su parte, Atlético marca el rumbo en el norte con cinco participaciones internacionales: Libertadores en 2017, 2018 y 2020; y Sudamericana en 2017 y 2020.
En 2011, Godoy Cruz participó por primera vez en una copa internacional, al terminar como el segundo mejor equipo en la tabla sumatoria del año 2010 en Argentina. Formó parte del Grupo 8 y ocupó la cuarta posición, quedando a un solo buen resultado de avanzar a la siguiente ronda.
Por su parte, Atlético logró su primera clasificación internacional en 2016, al finalizar tercero en su grupo. Accedió a la fase previa del certamen, donde eliminó a El Nacional de Ecuador y a Junior de Colombia, lo que le permitió ingresar a la fase de grupos. En esa etapa, quedó tercero y, por lo tanto, avanzó a los octavos de final de la Copa Sudamericana de ese mismo año.
En 2012, Godoy Cruz participó nuevamente, esta vez como el segundo mejor equipo en la tabla sumatoria del año 2011 en Argentina. Formó parte del Grupo 8 y terminó en la tercera posición, a varios puntos de clasificar a la siguiente ronda. El “Decano”, tras haber sido subcampeón de la Copa Argentina, clasificó a su segunda Copa Libertadores en 2018, donde se ubicó entre los ocho mejores de América.
En 2017, Godoy Cruz participó en la Copa Libertadores por haber obtenido el cuarto puesto en el Campeonato de Primera División 2016 de Argentina. Jugó en el Grupo 6, donde finalizó segundo en la tabla, clasificando a octavos de final por primera vez en su historia. Sin embargo, fue eliminado por Gremio, el eventual campeón. En 2019, el “Tomba” clasificó nuevamente, esta vez por ser subcampeón de la Superliga Argentina 2017-2018. Formó parte del Grupo C, terminó en segundo lugar y avanzó a octavos de final, donde fue eliminado por Palmeiras.
Desde 2005, la dirigencia de Godoy Cruz, con Mario Contreras como presidente, decidió que el primer equipo jugara como local en el estadio mundialista de Mendoza, el Malvinas Argentinas. Esta decisión no fue recibida con alegría por los simpatizantes “tombinos”, quienes, a pesar de su descontento, la aceptaron. Algunas de las razones argumentadas para no jugar en el Feliciano Gambarte fueron la capacidad del estadio, los accesos, el trabajo de la prensa, el mantenimiento y la seguridad. Desde entonces, solo volvieron a su estadio en un puñado de partidos durante la pandemia. Hoy, casi 20 años después, los hinchas del “bodeguero” celebran porque, en un par de semanas, el sueño de regresar al remodelado Feliciano Gambarte se hará realidad.
En Tucumán, por su parte, desde hace algunas semanas circula el rumor de que Atlético modernizará los alrededores del estadio José Fierro y edificará una nueva platea en el sector de calle Laprida.
No hay dudas de que Godoy Cruz y Atlético tienen muchas cosas en común. Ambos son clubes centenarios que, a pesar de las adversidades económicas, están dando sus primeros pasos en el fútbol de élite y se encuentran en pleno crecimiento. Así, están dejando en alto la bandera Argentina, partiendo desde el interior del país, con todo lo que eso significa.